MADRID
Datos de interés
Moneda: Euro
Idioma: ESpañol
Prefijo tfno: +34 si se llama desde fuera
Dif. horaria: Ninguna
Vacunas: No se exigen vacunas específicas.
Requisitos: DNI.
Bienvenido al foro
Vas a descubrir una ciudad muy viva, a veces escandalosa, metida de lleno en su Festival de Otoño. Siempre con atascos y obras faraónicas de por medio, pero rebosante de sugerencias y con la vista puesta en el 2012. Explórala por barrios.
Where is the movida? preguntó la presidenta de Islandia cuando en 1984 aterrizó en Madrid. Puede que no vengas de tan lejos, o sí. O que sólo hayas recorrido unos kilómetros para llegar o, incluso, vivas aquí. Pero seguro que te interesa saber dónde se cuece la vida cultural de Madrid y las direcciones clave para comer a buen precio. Este Madrid se prepara para ser elegida sede de los Juegos Olímpicos del 2012. El soterramiento de la M-30, la peatonalización de barrios céntricos como Huertas, la nueva estación de Príncipe Pío convertida en centro de ocio, o la ampliación de la línea de metro son sólo pinceladas del Madrid del futuro. Cada día abren nuevos hoteles y si quieres cenar en el restaurante de moda deberás reservar hasta con un mes de antelación. ¿Y los madrileños? Aquí, en el foro, nadie se siente extranjero porque, en realidad, la mayoría lo son.
Todo el arte del mundo en un paseo
Cualquier recorrido por los barrios más céntricos topará siempre con el auténtico vértice de la ciudad: el paseo de la Castellana. En total, 8 km de avenida, desde las modernísimas Torres Kio, en el extremo norte, a la estación de Atocha, en el sur (los dos tramos finales se bautizaron más tarde como Recoletos y paseo del Prado). Todo lo que hay que ver en Madrid está a un lado o a otro del paseo, así que tómalo como punto de referencia. La principal oferta museística está, precisamente, en el paseo del Prado, rebautizado para los turistas como “paseo del arte”. De hecho, hay un bono para acceder a las tres principales pinacotecas.
Las joyas de la baronesa
Comienza por el Museo Thyssen-Bornemisza (de 10 a 19 h. 6 €), que acaba de estrenar su ampliación: dieciséis nuevas salas que albergan la colección personal de Carmen Thyssen. “Siempre he sentido que el arte no es para uno solo y que debe ser compartido”, explica la baronesa en uno de los paneles del nuevo ala, que se integra perfectamente en el edificio existente. El itinerario arranca en la pintura del siglo XVII y termina con el cubismo. Un consejo: detente especialmente en las salas K (Monet, Pisarro), L (Gauguin) y N (Kandinski, Kirchner). Toda una delicia. Pasea a tu aire; hay espacio suficiente para que los visitantes no se estorben entre sí y lo que es aún más de agradecer: apenas existen barreras que limiten el acercamiento a cada cuadro. Perfecto para miopes. Además, hasta el 9 de enero de 2005 podrás ver la exposición Gauguin y los orígenes del simbolismo (6 €). Pásate por la tienda del museo, recién ampliada. Encontrarás piezas de cerámica con motivos Gauguin (18 €), el peluche Pablo Picasso (30 €) y ofertas en libros de arte, entre otras tentaciones.Cruza la plaza de Neptuno y te encontrarás de frente con el Museo del Prado (de 9 a 19 h. 3,01 €. Domingo gratis). En la actualidad está inmerso en un ambicioso proceso de ampliación, dirigido por el arquitecto Rafael Moneo, que finalizará la próxima primavera. Pero las obras no afectan a la colección permanente, tan numerosa que resulta imposible verla en un día; tómatelo con calma. La estructura puede parecerte algo confusa, pero los mapas gratuitos que dan a la entrada te facilitarán el recorrido. Imprescindibles: Goya y Velázquez.
Luego, entra en el vecino Jardín Botánico (1,50 €). Más de 30.000 plantas conviven en este espacio casi inconcebible en pleno centro. Un letrero a la entrada pide a los visitantes que traten el jardín como si de un museo se tratara. Haz caso, pero tampoco te cortes si te apetece sentarte en un banco a leer: el lugar lo pide.
Al otro lado del paseo está el Hotel Palace, toda una institución madrileña. Su rotonda se ha convertido ya en un mentidero para políticos (el Congreso está justo enfrente), escritores y periodistas. Date el gustazo de desayunar o tomar el aperitivo bajo su elegante cúpula mientras intentas descubrir algún rostro conocido. O ve más allá y apúntate a una de las cenas líricas que organizan cada mes (65 E/persona. Tlfno.- 91 360 80 00).
Un guiño a lo moderno
Al llegar a Atocha verás el edificio del Reina Sofía con su ascensor exterior de vidrio y acero (de 10 a 21 h. 3,01 €). Es uno de los museos de arte contemporáneo más extensos de Europa, sólo superado por el Pompidou de París. Aunque no seas muy aficionado al arte moderno, sólo el juego de luz y espacio del interior te cautivarán. Son inevitables el Guernica de Picasso y las salas de Dalí y Miró. Reserva fuerzas para la planta cuarta: Chillida y Tàpies.Antes de cambiar de barrio, recuerda que estás en una zona muy especial para los madrileños desde el pasado 11 de marzo. Haz un esfuerzo –apenas 200 metros a pie– y entra en la estación de Atocha para visitar el Espacio de las Palabras, creado en homenaje a las víctimas del atentado.
Tapas en el viejo Madrid
Tan inevitable como atractiva te resultará la plaza Mayor, uno de los espejos más fieles del Madrid de los Austrias y un punto de partida perfecto para pasear por el casco antiguo. Las mañanas de los días laborales son los mejores momentos para disfrutar de la arquitectura de la plaza o desayunar en alguno de sus cafés de toda la vida, muy entretenidos pero algo caros. Los sábados y domingos el panorama cambia: entre mercados numismáticos y turistas, la plaza suele estar atiborrada. En el número tres encontrarás una Oficina de Turismo Municipal, que abre de 10 a 22 h, de lunes a sábados. Aprovecha y hazte con un mapa.
Exploraciones y postales
Tienes muchas opciones para continuar explorando: tantas como entradas y salidas tiene la plaza, pero quizá el arco de Cuchilleros sea una de las postales más típicas. De aquí a la Cava Alta que, según la leyenda, fue un foso por el que moros y cristianos atravesaban la muralla que cercaba Madrid en la Edad Media. Su paralela, la Cava Baja, era lugar de paso de diligencias y por ello, estaba sembrada de posadas y casas de comidas. Hoy, la tradición gastronómica continúa.Y aunque durante años se consideró una zona de tapeo para guiris, con restaurantes de renombre (Botín, Casa Lucio), de un tiempo a esta parte la gente del foro ha reconquistado el territorio. Han florecido bares de tapas, vinacotecas y pequeños restaurantes de picoteo rápido frecuentados por personal más bien pijo y estudiantes extranjeros. Los fines de semana no cabe un alfiler. Aunque sea a codazos, hazte un sitio en la barra de la Taberna del Almendro 13 (pillar mesa en fin de semana es casi un milagro), junto a la Cava Baja. Pide huevos rotos, sus roscas y sus almendritos de chicharrones. En El Tomás (Cava Baja, 42) se respiran aires modernos y se toman pinchos (2,50 €) al ritmo de la música más cañera. Entre semana, La Carpanta (Almendro, 22) es muy recomendable: los miércoles preparan un estupendo cus-cús y los viernes, cocido madrileño. Más innovador es Matritum (Cava Alta, 17); nada que objetar a sus montaditos de queso de cabrales con compota de manzana, ni a su carta de vinos con más de 250 variedades de todo el mundo.
Vete de paseo
Explora lo desconocido se ha propuesto desvelar los secretos de la ciudad con sus Paseos por Madrid. Hay varios a la semana y durante dos horas se adentran, por ejemplo, en el Madrid medieval (6 €). Seguro que conoces la muralla árabe e incluso has visto los restos que hay en la cuesta de la Vega, pero ¿sabías que en el parking de la plaza de Oriente se ven las ruinas de una atalaya? ¿o que antes de la Almudena, en su lugar, había una mezquita? El paseo sigue por la calle de la Morería, plaza de la Paja, etc. Fíjate en los azulejos que indican las calles: los dibujos explican el porqué de sus nombres. Hallarás sitios curiosos, como el pozo donde cayó el hijo de san Isidro y del que fue rescatado milagrosamente (museo de San Isidro) o la iglesia de S. Nicolás de los Servitas, la más antigua de la ciudad. Apúntate en el Tlfno.- 91 468 62 89.De los Austrias pásate al barrio más chic
En la cercana plaza de Herradores encontrarás dos joyas: el Museo del Pan Gallego, con empanadas, bollos y pan de mil clases recién horneados, y la vinoteca-librería El Lector, toda una novedad. Puedes tapear en la barra desde 2,25 € (pincho de roquefort con nueces o tortilla de puerros, por ejemplo) o sentarte en el salón a degustar un solomillo con foie a la vez que compras la última novela de Ruiz Zafón. También organizan cursos de cata (Tlfno.- 91 559 29 32). Y muy cerca, en la calle Santiago, se ubica una de las tiendas de moda masculina más originales de Europa: One-Way Hombre, que desde hace dos años lleva la voz cantante en esto de la ropa para él.
Cruza la calle Mayor y entra en el mercado de San Miguel, uno de los de más solera de la capital. Calle abajo está la plaza de la Villa, sede del Ayuntamiento de Madrid y que puedes visitar, gratis, cada lunes a las 17 horas. Estás a un paso de la catedral de la Almudena, el Palacio Real, la plaza de Oriente y el Teatro Real. Ahora toda la zona es peatonal y resulta un placer pasear, sin coches de por medio, por sus jardines o sentarse en alguna de sus terrazas, caras, pero deliciosas.
Si no andas sobrado de tiempo, céntrate en visitar el Palacio Real (6 E. Miércoles, gratis para ciudadanos de la UE). Te llevará, al menos, un par de horas, pero merece la pena ver ciertas curiosidades, como las extravagantes estancias de Carlos III, el primero de sus residentes, o la impresionante colección de relojes de Carlos IV.
El barrio literario
Los cafés, teatros e iglesias de los alrededores de la plaza de Santa Ana fueron el centro de la vida literaria en la España del siglo de Oro (XVI y XVII), de ahí el sobrenombre con que se ha bautizado a la zona: el “barrio de las letras”. Hay un reguero de pistas para seguir: en el número 87 de la calle Atocha se imprimió la primera edición de El Quijote; en la plazuela de San Juan, una placa indica la casa donde nació el poeta Leandro Fernández Moratín; en el número 11 de la calle Cervantes vivió y murió Lope de Vega (miércoles, entrada gratuita) y en el 21 está la biblioteca del Ateneo. En la propia plaza de Santa Ana se levanta el Teatro Español donde, por cierto, hasta el 5 de diciembre podrás ver La Celestina (de 3 a 20 €). Bares y restaurantes guardan anécdotas de personajes ilustres, desde Valle Inclán al omnipresente Hemingway (Cervecería Alemana, Miau). Pero te recomendamos una opción de nuevo cuño: la vinacoteca Barbechera, pegada al teatro y con una vista estupenda sobre la plaza. Las mesas son toneles y la barra está repleta de pinchos varidos (1,90 €). Prueba sus croquetas de espinacas y sus tostas (4,40 €). Ofrecen vinos de todo el mundo y te los sirven por copas. Acaba con su exquisita tarta de chocolate y avellanas.¿Sabías que las primeras casas de Madrid con WC y agua corriente fueron las construidas por el marqués de Salamanca entre las calles Serrano, Claudio Coello y Jorge Juan? Más tarde, el barrio, que ya prometía ser de postín, adoptaría el nombre de su constructor. Hoy, no es nada peyorativo afirmar que Salamanca es el barrio pijo de la capital; gente guapa que viste de marca, se mueve en coches de lujo y llena los locales más exclusivos. Enseguida te percatarás de que los escaparates están en consonancia con el barrio. Y es que entre Serrano, Ortega y Gasset, Goya y Velázquez se concentran las tiendas más caras de la ciudad (Verino, Schelesser, Chanel, Dior, Escada, Loewe). La última incorporación es Amarcord (Claudio Coello, 113), propiedad de la actriz Penélope Cruz (descarta tropezártela en los probadores), y con moda importada de EEUU a precios en consonancia con el barrio.
Más allá de los escaparates
En el barrio de Salamanca también puedes disfrutar del arte y la música, y gratis. En la Fundación Juan March (Castelló, 77), puesta en marcha por una de las mayores fortunas del país, se ha convertido en toda una institución. Ahora y hasta el 16 de enero podrás admirar obras de Delacroix, Manet, Renoir, Gauguin y Rodin en la exposición Figuras de la Francia Moderna. Además, la fundación organiza ciclos de música clásica (Tlfno.- 91 435 42 40. www.march.es). En estas calles se concentran también las galerías de arte privadas más importantes de Madrid: Blanquerna (Serrano, 1), Durán (Villanueva, 19) o Malborough (Orfila, 5). Haz un alto para un tentenpié en Lecafé, recién abierto en Recoletos. Está decorado con las portadas de los periódicos de fin de siglo, dispone de toda la prensa internacional y ofrece platos sencillos, cafés y comida de entre horas a precios muy normales. Y no dejes la zona sin pasear por el El Retiro. De lunes a viernes encontrarás un ambiente relajado. Sábados y domingos por la mañana el parque bulle: mimos, músicos, echadores de carta y terrazas a rebosar. Pide lo típico: caña y patatas fritas.Chueca, viva el descaro
En los años 80 nada hacía presagiar que este barrio, de aspecto lastimoso por aquel entonces, se pudiera convertir en la zona más puntera de la ciudad. Pero el milagro se produjo gracias al desembarco de la comunidad gay que, poco a poco, fue tomando el barrio hasta convertirlo en un lugar habitable y, sobre todo, atractivo. La zona (entre Gran Vía, Fuencarral y paseo de Recoletos) se ha popularizado tanto entre el público heterosexual que muchos gays la encuentran ya algo light. Aquí vas a descubrir la mayoría de los restaurantes y cafés de moda, las tiendas de decoración más audaces o las zapaterías más vanguardistas. Si hay un barrio de Madrid donde peinados, vestimentas y conductas ni sorprenden ni molestan a nadie, es este. El día puede comenzar en El Diurno (San Marcos, 37), un café que rompe moldes: mientras desayunas puedes alquilar un DVD, apuntarte a un curso de cine o llevarte la cena a casa. Abre todos los días de diez de la mañana a medianoche.
Mesas de diseño
El epicentro del barrio es la plaza de Chueca y, salvo nevadas imprevistas, siempre hay una terraza al aire libre donde tomarte una cerveza. Eso sí, a la hora de cenar, reserva: los fines de semana la cosa se pone imposible. Además, la mayoría de los restaurantes han establecido dos turnos (21.30 u 11.30 h), como en La Bardemcilla (Augusto Figueroa, 47. Tlfno.- 91 521 42 56). El local es propiedad de la familia Bardem. Fotografías de Javier, Pilar y el resto del clan por todas partes y una carta en clave cinematográfica: Más que amor (lomitos de boquerón), Huevos de oro (huevos estrellados), etc... y la última incorporación, como no podía ser menos: la Copa Volpi (tiramisú veneciano). También es muy habitual el menú con precio cerrado, como en Divina la Cocina (Colmenares, 13. Tlfno.- 91 531 37 65), un veterano del barrio. Por 26 €, sirven dos platos de temporada y postre. Sin embargo, en el nuevo y blanquísimo Bazaar (Libertad, 21) no se admiten reservas: el primero que llega, el primero que cena (desde 15 €/persona). Pide ensalada mediterránea, lubina y el postre estrella: Chocolatísimo. Y en plan romántico: Madrilia (Clavel, 6. Tlfno.- 91 523 92 75), con su micuit artesanal y sus mesas a la luz de la vela.Renueva tu vestuario
Si te gusta ir a la última, Chueca puede resultar imprescindible a la hora de ampliar tu armario. Comienza por el mercado de Fuencarral (Fuencarral, 45. De 10 a 21 h), templo de la moda alternativa y accesorios ultramodernos. No esperes precios económicos, pero si originalidad y variedad. Prueba con los modelos que propone Pepa Karneco o Divina Providencia. Enfila la calle Augusta Figueroa. En el número 3 la actriz Paz Vega acaba de inaugurar Max Addict, una zapatería muy provocadora. También encontrarás kimonos (130 E), sombreros de Ariane Millinery y faldas que son piezas únicas (150 E). Los peques tienen su rincón en El Tintero (Gravina, 5) diseñan bodys, camisetas y sudaderas pintadas a mano desde 25 E. Y el último grito: tiendas donde, además de comprar moda, puedes tomar un café o una tapa de sushi, como en Babarrua (Libertad, 17) o Mitsuoko (Fuencarral, 59).Sigue la pista: Muévete, come, duerme y disfruta
En Madrid todo es posible. una cama frente al teatro de la Ópera o una copa de helado de madrugada. ¡qué aproveche!
Cómo llegar
Si escoges el avión, debes saber que desde el aeropuerto de Barajas hay metro hasta el centro (línea 8): tardarás 12 minutos a Nuevos Ministerios. También hay un autobús (2,40 €) que conecta con la plaza de Colón cada 10 minutos, con paradas en Avda de América, María de Molina y Serrano. Un taxi hasta el centro te costará alrededor de 20/25 €. Suele haber grandes colas; respétalas. Si llegas en tren, la estación de Atocha es el referente más importante (Ave, Alaris, Altaria) y también está conectada con el metro (línea 1). Y si has decidido venir en coche y te alojas en el centro de la ciudad: déjalo en el parking o no disfrutarás de tu estancia.Esto es lo último
Se acabó esperar al verano para tomar un buen helado. En el original y divertido Giangrossi puedes tomarlos los 365 días del año y hasta las dos de la mañana. Marcelo y Nahuel, dos amigos argentinos que aterrizaron en Madrid el pasado año, han puesto en marcha un nuevo concepto de heladería. Su local, abierto hace unos meses junto a la glorieta de Ruiz Giménez (Alberto Aguilera, 1) ha roto los estereotipos: salón amplio, con pantallas gigantes, decoración minimalista, cómodos sofás blancos y enormes ventanales a la calle. Y lo mejor: helados elaborados cada día de manera artesanal, con esencias naturales (vainas de vainilla, almendras seleccionadas, leche, cacao). El resposnsable es el maestro heladero Osvaldo Balestrino ¿Puedes resistirte a un dulce de leche casero, una cereza a la panna, al yogurt con miel, o a una vainilla con vino de Mistela? Puedes elegir entre generosos cucuruchos (3,50 €), tarrinas, copas o botes de 1/4 kilo o más (4 € ) todos servids con pala, a la manera italiana. Y si no te apetece salir, te lo llevan a casa (Tlfno.- 900 55 50 09).Un otoño muy teatral
Estos días Madrid vive su Festival de Otoño (del 13 de octubre al 14 de noviembre). Puedes disfrutar del teatro, la danza y la música en diferentes espacios: Círculo de Bellas Artes, Sala Cuarta Pared, Teatro de Madrid, Teatro Albéniz y Teatro de la Zarzuela. El programa es muy amplio, así que será mejor que lo consultes en www.madrid.org.Y si quieres estar al día, los que se están llevando al público de calle este otoño son los Monty Python, en el Teatro Alfil (Pez, 10). Las compañías Imprebís e Yllana se han unido para presentar, en castellano, los mejores sketches del famoso grupo británico (desde 15 €. Tlfno.- 902 48 84 88).
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